lunes, 7 de febrero de 2011

-LA BATALLA CONTRA EL CÁNCER-

El cáncer es una enfermedad de las células que componen las distintas partes de nuestro organismo.En una persona sana, lo normal es que las células se dividan y después mueran, sin embargo, en las personas que padecen cáncer sus células continúan multiplicándose y esta continua división celular produce acumulaciones de células o bultos anómalos denominados tumores. Se pueden distinguir dos tipos de tumores: benignos o malignos.
Cuando es beningo las células se multiplican sin ningún control, pero sin extenderse a otras partes del organismo(tejidos, órganos). Este tipo de tumores no hacen peligrar la vida, pero si su crecimiento continúa estos tumores pueden ejercer una presión sobre los órganos, por lo que se aconseja detectarlos rápidamente para poder extraerlos. Por el contrario, en los tumores malignos(cáncer) las células pueden extenderse a otras zonas del cuerpo y crecer en cualquier parte de este. A esto se denomina metástasis.
El medio de propagación de las células cancerosas es el sistema sanguíneo y el sistema linfático, por lo que para detectar la gravedad del cáncer es necesario saber si las células cancerígenas se han introducido en el sistema linfático.
Cuando se detecta un tumor, para saber si éste es benigno o maligno se realiza una prueba denominada biopsia, que consiste en extraer una muestra de tejido del tumor y analizar el tipo de células que lo forman.

Una vez que sabemos lo que es el cáncer y lo peligroso que es para la vida de las personas, la medicina ha desarrollado una serie de tratamientos para la lucha contra él:
La cirugía: Este método se utiliza cuando el tumor es pequeño y está localizado.
Si el cáncer se ha extendido a otras zonas a través de los sistemas sanguíneo y linfático hay que llevar a cabo otros tratamientos.
La radioterapia: Este método utiliza partículas de alta energía que a través de una máquina denominada acelerador lineal, se dirigen hacia el lugar concreto donde se encuentra el tumor.
Para llevar a cabo este tratamiento el enfermo debe ir al hospital donde se le aplicará una sesión de aproximadamente veinte minutos.
La quimioterapia: Este tratamiento consiste en utilizar medicinas con el fin de eliminar, dañar o retrasar el crecimiento de las células cancerosas.
El principal problema que produce este tratamiento es que las células cancerosas son parecidas a las células que las rodean, lo que hace que los fármacos utilizados dañen también a las células no cancerígenas. Este tipo de tratamiento provoca unas consecuencias sobre el paciente, como son: náuseas, caída del pelo, vómitos, anemia....
En la actualidad se están utilizando combinaciones de quimioterapios para conseguir efectos menos dañinos para las células normales.
Estos tres tratamientos suelen utilizarse en algunos casos de manera conjunta, es decir, la radioterapia y la quimioterapia se usan antes y sobre todo después de la cirugía, con el fin de eliminar aquellas células tumorales que han podido sobrevivir alrededor del tumor.
También existe otro método, la hormonoterapia, método que consiste en el uso de las propias hormonas del cuerpo que controlan el crecimiento de las células consiguiendo detener el crecimiento del cáncer.

Pero estos métodos muchas veces no son eficaces y no pueden acabar con el cáncer, por eso hay que ir más allá e intentar investigar y descubrir otros tratamientos que lo erradiquen por completo:
Cuando se sabe que una persona padece cáncer lo primero que habrá que hacer es intentar que no se extienda y se reduzca hasta el punto de origen. Para ello se extraerá una parte de ADN de las células cancerosas, después, mediante procesos de laboratorio se investigaría el gen que hace que estas células se multipliquen descontroladamente. Posteriormente se modificaría la parte del gen que provoca el cáncer y una vez conseguido ésto se introduciría en el organismo este nuevo gen modificado que la tener nueva información genética impediría el desarrollo de las células cancerígenas.
Otro método sería reducir la vida de las células cancerosas. Para ello, se introducirían células madre en la sangre , las cuales se dirigirían al lugar infectado por las primeras y allí actuarían como glóbulos blancos fagocitando sustancias extrañas, como son las células cancerosas. Una vez hecho esto, las células madre ocuparían el lugar de las anteriores y realizarían su función correspondiente a la zona la cual había sido anteriormente afectada.
Si el cáncer esta muy extendido y no se sabe con claridad el lugar de origen, se podría llevar a cabo lo siguiente:
Se prepararía un líquido con la cualidad de tinte fluorescente. Éste se introduciría en la sangre y al llegar a la zona donde se extienden las células cancerosas las cubriría de un color llamativo produciéndose un cambio de color más intenso en las células del lugar de origen del cáncer. Después se realizaría un escáner donde se apreciaran estos colores, y una vez conocida la zona de inicio hay que someter al paciente a descargas eléctricas(de nivel bajo) con la capacidad de absorción, impidiendo que las células avancen y sean absorbidas hasta el punto de origen. Estando allí controladas se llevaría a cabo el método de cirugía para su completa eliminación.
Estos métodos anteriormente citados no tienen en la actualidad ninguna valía puesto que la medicina no los ha llevado a cabo posiblemente porque será algo imposible de realizar. Sin embargo, el afán por acabar con esta enfermedad nos lleva a pensar en cualquier método ficticio e imposible y con el que algún día nos levantemos con la noticia de que el cáncer ha sido vencido.

                                                                                  

martes, 1 de febrero de 2011

-CONCEPTOS IMPORTANTES-

PARTENOGÉNESIS Y HAPLODIPLOIDÍA-


-PARTENOGÉNESIS-


La Partenogénesis es una forma de reproducción basada en el desarrollo de células sexuales femeninas (óvulos) no fecundadas.
Este proceso consiste en una serie de divisiones celulares del óvulo no fecundado, las cuales pueden iniciarse debido a factores ambientales o químicos y descargas eléctricas.
Se dice que es una reproducción asexual, porque no hay recombinación genética y los individuos que se obtienen a partir de ella son idénticos a los progenitores, o una reproducción sexual monogamética, es decir, reproducción en la que interviene una sola célula sexual o gameto y aparece el proceso de meiosis.
Dicho proceso se suele dar en animales como platelmintos, crustáceos, insectos, anfibios y reptiles, y en algunos tipos de peces también se puede producir.
La partenogénesis se descubrió por primera vez en la especie de las abejas.
El producto de este tipo de reproducción se denomina ``partenote´´, el cual carecerá de cromosomas masculinos. 
En el caso de las abejas y otros insectos, las hembras son diploides, es decir, poseen dos series de cromosomas, procedentes de huevos fecundados, sin embargo, los machos son haploides, es decir, tienen un solo juego de cromosomas, y son partenogenéticos.


-HAPLODIPLOIDÍA-


Teniendo todo esto claro, podemos hablar del término Haplidiploidía.
Es una forma de partenogénesis que se da sobre todo en insectos.
En ella todas las hembras poseen dos series de cromosomas (diploides) y los machos una sola(haploides).
Las hembras tienen la capacidad de elegir si sus óvulos/huevos serán fecundados con las células sexuales de los machos o no.
En el caso de que sean fecundados, la descendencia son hembras diploides, pero si son fecundadas nacen machos haploides.
Un ejemplo es la especie de las abejas: las abejas obreras tienen la  mitad de los genes de sus madre pero todos los genes de su padre. Su parentesco con la madre del 50% y el del padre será del 100%.
En el caso de los zánganos, su único deber es tener más descendencia para poder transmitir sus genes íntegramente.


En conclusión, estos dos términos están relacionados en tanto que la haplodiploidía surge a partir de la partenogénesis y en los dos casos las hembras son diploides y los machos haploides.